¡Basta ya de jugar a la Bruja! y comencemos a trabajar en serio, a estudiar de verdad
La Brujería es cosa sería, es un tema profundo, delicado y puede llegar a ser peligroso en manos inexpertas o equivocadas.
La Brujería se estudia como todo oficio, se practica como todo arte y tiene sus propios procedimientos y técnicas como toda ciencia NO ES UN JUEGO DE NIÑOS.
Las nuevas tendencias New Age han descuidado muchísimo los aspectos relevantes del estudio serio y detallado de la Brujería. Tanto brujos como chamanes urbanos de cursos esporádicos están sepultando el oficio y han menos cabado el trabajo serio y dedicado que muchas generaciones vienen realizando por milenios.
¿Por qué estudiar la Brujería? por que es un arte complejo: intenta imaginar las practicas mágicas al equivalente de abrir la compuerta de una represa (el agua como la energía sale con mucha fuerza, es desbordante si no se encausa, puedes abrir la represa, pero volverla a cerrar es muy difícil), ahora intenta visualizar que el agua/energía en esa represa viene de fuentes inagotables – como referencia para que dimensiones la cantidad de presión contenida – muy bien, ahora haremos la comparativa: abrir la compuerta seria «la técnica» o los procedimientos de Brujería, no poseer ese conocimiento puede producir que la compuerta se averíe o incluso se rompa irremediablemente; entonces el practicante (inexperto) no tendría posibilidad alguna de enmendar sus acciones y la represa terminaría por colapsar. Si estudias seriamente tendrás cautela y humildad para explorar el camino, si recibes la guía experta de algún maestro reducirás al mínimo los riesgos que implica la practica y harás más eficiente tu aprendizaje.
Jugar a la Bruja siempre trae consecuencias, la mayoría de las veces muy poco favorables para el practicante y su entorno cercano, y no se trata de que la Brujería sea una fuerza maligna y dañina de por si, pero es una fuerza de la naturaleza; y como tal, puede ser dulce y despiadada a la vez. En un segundo, una nube puede convertirse en tormenta, una chispa en un incendio y un descuidado practicante en la presa.
Estudia, lee y aprende lo más que puedas, entonces recién: practica.
Cada vez hay más cursos dictándose por el mundo que toman a la Brujería como un tema serio y digno de estudio, cada vez más, los conocimientos – antes secretos – de la Brujería han comenzado a ver la luz pública ¡pero cuidado! entre tanta oferta y demanda también hay gente que se aprovecha de la ignorancia. ¡Cuestionalo todo! e investiga muy bien las fuentes desde donde tomarás el conocimiento.
El conocimiento nos hará libres, la ignorancia: sumisos.