Muchas cosas tuvieron que ser dogmatizadas por la propia seguridad del iniciado y no porque era un capricho al azahar de nuestros lawas
Debemos tener claro que en términos de Ocha, nuestra religión es muy diferente a como se practica en Nigeria. Muchas veces, hay cosas que no comprendemos a plenitud, quizás por lo joven del sistema mismo que tenemos. Estos mismos tabúes que no logramos comprender a cabalidad, quizás nos parezcan contradictorios al analizar un Odu y muchas veces no les encontramos lógica alguna. Lo cierto es que en Cuba, fue donde se comenzó a entregar a los Orishas en conjunto y puede ser que muchas cosas no salieron bien en los inicios, por lo que nuestros viejos, al analizar los hechos y ver que estas iban en detrimento de los iniciados, se vieron en la necesidad de idear dogmas debido a malas experiencias o vivencias, al notar que realizarlas resultaban contraproducentes.
No podremos encontrar jamás en Nigeria, una causa clara ni convincente de porque los hijos de Changó no hacen Ochún ni viceversa, no podremos encontrar jamás en Nigeria, porque una hija de Yemayá no hace Oyá ni viceversa, no podremos encontrar jamás en Nigeria el porque Oyá no puede estar en una consagración de un hijo de Changó ni viceversa, porque simplemente estos precedentes no existen en Nigeria, ya que allá solo se hacen las consagraciones de “Pata y Cabeza” y un Olorisha de un Orisha en particular, ni siquiera puede entrar a una consagración de otro Orisha que no sea el suyo propio. Esto es muy distinto a entregar todos los Orishas como lo hacemos en Cuba, donde se pudo notar que hacer ciertas cosas resultaba “Conflictivo”. Podremos ver muchos Odus en los que encontraremos “justificaciones” y hasta “interpretaciones” para que estos dogmas se respeten, pero lo cierto es que en mi consideración personal, esto tiene que ver más con el bienestar de la persona, que con una interpretación de un Odu en particular, ya que algo no resulta bien.
Nuestros viejos quizás tuvieron que aprender estos “Dogmas” por el camino difícil y debemos pensar que en todo caso, las cosas se debieron a malas experiencias que tuvieron y que se vieron forzados a establecer como Dogmas, aun cuando queramos justificarlos con algunos Odu de Ifá o Diloggun, que hablen de situaciones donde un Orisha está de guerra con otro por cualquier motivo o porque uno coma Carnero y otro no y que por ello no pueden estar o realizar las consagraciones de uno hacia el otro. La verdad, que la historia de que Oyá no está en una consagración de Changó ni viceversa, porque para ella el carnero es tabú dado a que renunció a él, nunca me ha convencido del todo. Si esto fuese así, no se podría por ejemplo, hacer un Changó con Obbatalá dentro del cuarto, ya que el Carnero también es tabú para Obbatalá. De hecho, no se podría hacer Ochún con Oró a Obba, ya que Ochún come Chivo capón y el Chivo es tabú para Obbá que come Chiva, pero a la vez, Ochún no come Chiva, ya que es tabú para ella ¿Entonces?
Una evidencia tangible de que ciertas cosas pudieron ser conflictivas y se justificaron con Odu por ejemplo, es que Changó no hace Ochún ni Ochún hace Changó, por el respeto que debe existir entre los dos Orishas y hasta se “sustenta” en el Odu de Ifá Obara Ogbe, donde por causa de la terrible guerra entre los dos, el mismo Olodumare tuvo que intervenir y prohibir que los hijos de Changó tocaran las cabezas de los hijos de Ochún y viceversa. Esto tuvo que ser necesariamente, una interpretación del Odu que se tuvo que hacer extensiva a todos y establecerlo como un Dogma, basados probablemente en muy malas experiencias, que se tuvieron con este tipo de consagración. De hecho, Don Nicolás Angarica, en su Manual del Orihate, en la página 63 decía lo siguiente:
“Las Oló-Oshun, no deben hacer a los Oní-Shangó, porque cuando a las personas que lo hacen no le ocurra nada, como muchos se jactan en proclamar, no es menos cierto que a la postre, a la persona que se lo hacen le desvían su camino y todo su bienestar se troca y en muchos casos los llevan hasta la muerte, sin éste darse cuenta de su caso porque nadie se lo explica”.
Como se puede ver, esto era una realidad a 1955, pero muchos insisten en que no pasa nada. Otra evidencia tangible de que las cosas no siempre resultaron satisfactorias y que pudieron llevar al establecimiento de ciertos Dogmas considerados “Inviolables”, es por ejemplo, la consagración directa de Oba Naní. Según nuestra historia oral, esto ocurrió en 1942, cuando una Iyalocha llamada Ña Mariana, una Lucumí consagrada en Obbá directo, intentó consagrar a una mujer de escasos recursos económicos y que se dice que tenía problemas mentales. Esta mujer se llamaba Teresa. La conocida Iyalocha Ña María Towá, advirtió que Obbá no debía hacerse directamente, pero ignorando la advertencia, Ña Mariana consagró a Teresa y su condición mental empeoró. Después de este incidente, Obbá ya no se consagró directamente a ninguna otra persona. De allí, el porque para consagrarse, hay que hacer Ochún con Oró a Obbá y hasta tenemos el Odu Ogbe She, que “sustenta” que hacer Obbá directo es peligroso. Lo cierto es que podría ser que hacer Obbá Directo, resultara “conflictivo” con nuestra forma particular de hacer Sodo Orisha y hasta con nuestras lecturas dobles del Diloggun.
De hecho, hasta en términos de Ifá tenemos el mismo problema. Nuestros viejos siempre sostuvieron que los hijos de Orishas Guerreros, si tenían paso a Ifá, no debían consagrar Ocha. Solo debían lavarlo y pasar a su consagración de Ifá. No tenemos las causas, ni sabemos el porque, ni vemos que exista un Odu que lo avale, pero lo cierto es que nuestros viejos establecieron esto como un Dogma. Lo más probable es que algo no sale bien en las consagraciones de Ifá a los hijos de Orishas Guerreros que tienen Ocha consagrado. Hasta hemos visto conflictos en Odu de Ifá, por ejemplo con las consagraciones de los hijos de Oggún, donde en Oggunda Meyi establece que solo los hijos de Oggún que tengan este Odu en Awofakan, deben pasar a Ifá, pero se contradice con Irete Meyi, que dice que los hijos de Oggún que tengan este Odu en Awofakan no deben pasar a Ifá. Esto desprende la pregunta: ¿Por qué Irete Meyi establece que los hijos de Oggún “Con ese Odu”, no se les debe hacer Ifá, si ya Oggunda Meyi establecía que solo los hijos de Oggún con ese Odu debían pasar a Ifá? No lo sabremos con certeza, pero nuevamente podemos especular en algún “conflicto” con dicha consagración.
Como se puede observar, nuevamente las cosas no están claras en el porque. Pero si nos remitimos a la historia, vemos que la consagración en Ocha para luego pasar a Ifá, también es un sistema totalmente nuevo y que se dio tan solo a mediados del siglo XX y que fuera instaurado por Don Bernardo Rojas, por lo que no podemos tener la certeza del porque existen conflictos con las consagraciones de Orishas Guerreros y la consagración en Ifá, aun cuando se quieran avalar con Odus de Ifá. Sin embargo, hoy en día los “Revisionistas” obvian esto, por las razones que sean, ya que sienten que saben más Ifá o más Ocha que nuestros viejos, sin darse cuenta, que nuestra religión, como la tenemos hoy en día, es un proceso relativamente moderno y como tal, puede tener sus limitaciones.
Otro ejemplo histórico de situaciones similares, lo tenemos por ejemplo, en el caso de Don Ramón Ubre, el primer ahijado de Don Tata Gaitán, Oggunda Fun, donde se le hizo una obra avalada por un Odu, pero algo falló en el proceso, lo cual inutilizó de por vida a Don Ramón y no pudo trabajar más Ifá. Esto sostiene el punto, que muchas cosas tuvieron que ser dogmatizadas por la propia seguridad del iniciado y no porque era un capricho al azahar de nuestros viejos. Nadie, en su sano juicio, quiere pasar por estas malas experiencias, ni dañar la vida de nadie, porque simplemente esa persona no entró en esta religión a que se le arruinara la vida, aunque hoy en día, esta parece ser la norma, especialmente la de los “revisionistas”, solo por no querer ver que muchos de nuestros “Dogmas”, en realidad son ADVERTENCIAS.
Sin embargo, esto nos deja ver claramente, que no siempre las cosas que se hacían comúnmente en Nigeria, donde solo se hace el Santo de Pata y Cabeza, funcionaban de la misma forma donde se entregan todos los Orishas, razón por la cual, muchos de estos “Casos Conflictos” tuvieron que ser Dogmatizados como prohibiciones, por la propia seguridad del iniciado. Al parecer, esto nos muestra que hay personas que no quieren aprender de las malas experiencias que tuvieron nuestros viejos y prefieren ir a experimentar, pero que no sea en la cabeza de ellos o la de un hijo o hija, sino en la cabeza de otros. De esto nos habla claramente el Odu Obara Iwori: El Conejillo de Indias y también nos lo dice el viejo refrán popular: “Nadie aprende por cabeza ajena”.
En otras palabras, esto pudo ser un proceso doloroso de aprender, ya que podemos ver por ejemplo, que a pesar de ser enemigos acérrimos y que se la pasan en constantes peleas, ni Oggún tiene prohibición de estar presente en una consagración de Changó, ni Changó tiene ninguna prohibición de estar presente en una consagración de un hijo de Oggún (Excepto para los Ijeshas en Cuba). Esto necesariamente tuvo que mostrarles a nuestros viejos que no era contraproducente y por ello no hubo necesidad de un Dogma de prohibición para la presencia de estos Orishas en las consagraciones de sus respectivos hijos, a pesar de que estos Orishas son enemigos y que cada vez que se encuentran, cualquier cosa puede suceder. De hecho, existen muchos Odu que hablan de estas legendarias guerras y que podrían “justificar” que no se haga, pero lo cierto es que nada sale mal atribuido a esto.
Ver estas limitaciones sin tomar los hechos y marcos históricos en los que se desenvolvió nuestra religión, sería un ejercicio vano, ya que siempre existirán los “Revisionistas” que quieren cuestionar nuestras tradiciones, solo porque algunos de estos dogmas no los dejan ejercer un sacerdocio pleno en Orisha. Nos guste o no nos guste nuestro sistema de lectura de Diloggun y nuestro método de Consagración de Ocha es nuevo y cuenta con menos de cien años, pero además partió de intercambios, reorganizaciones, innovaciones, transculturaciones y apropiaciones, siendo entonces que es muy probable que todos los secretos de este sistema, no hubiesen sido conocidos. No existe una literatura sobre nuestros sistemas de adivinación de Diloggun y de consagración de Orisha y no tenemos fuentes fidedignas que nos aseguren que este tipo de consagraciones se daban dentro de los palacios Oyó y/o Egbadó.
©Oshe Tonti Oshe: Un Breve Marco Histórico del Ensayo: Oshe tonti Oshe. Por que sus limitantes?
Autor: Olúwo Águila de Ifá.
Gran Consejo Internacional De Mayores De Ifá y Osha de La Iglesia Cabildo de Ifá Alcázar de Olofin.