Según el rito Arara esta deidad no se alimenta de la sangre de los animales si no de su espíritu
Naná Burukú o Nanú es una Orisha y se le atribuye poderosa espiritualidad desde la antigüedad. Rige en los ojos de agua, las desembocaduras de los ríos, los pantanos y en las lagunas. Entre los creyentes de origen Iyesá la consideran un Obbatalá y entre los de origen Nina Popo, un Orisha independiente. Naná Burukú da fortaleza a la cabeza del individuo.
Es orisha mayor del Panteón yoruba. Puede ser «ángel de la guarda» y coronarse en la ceremonia de Kari Osha, este a diferencia de los menores que no se coronan:
Es la divinidad de la llovizna, del lodo, la mediadora entre la vida y la muerte. Su culto es de procedencia fon, ashanti y arará (Dahomey), sobre todo de territorio Mahins. Naná es anterior a la llegada de Oduduwá a Ilé Ifé y tuvo posteriormente un enfrentamiento con Oggún, por eso sus ebos no se hacen con cuchillo de hierro, se realizan con un cuchillo hecho de caña brava.
Desde la perspectiva vudú, todas las entidades espirituales llamadas Vodouns (entre los yorubas Orishas) surgen o nacen de Nanán Baruqué. Nanán Baruqué se considera una energía femenina que representa la sustancia primordial del universo. Nanán Baruqué ama mucho a sus hijos y les desea lo mejor en las tareas que ella ha establecido para ellos en la creación.
Desde la perspectiva yoruba a Nanán Baruqué se la considera diosa de los misterios y simultánea a la creación del mundo. Cuando Oduduwa separó las aguas estancadas y liberó la tierra, Nanán apareció en el punto de contacto de estos dos elementos: el lodo, lugar donde se la ubica.
Según el rito Arará, Naná no se alimenta de la sangre (eyerbale) de los animales, sino de su espíritu, es por esto que sus animales mueren asfixiados y luego se trozan con el cuchillo de caña brava. No se hace como Orisha tutelar y se recibe junto con Babalú Ayé. En la ceremonia de entrega, se coloca su receptáculo sobre un triángulo pintado en el piso con Osun y cubierto por hojas de tabaco, se recibe su cetro llamado Ibirí y su collar.
Atributos
- Su receptáculo es una tinaja de color blanca, cuya tapa una vez colocados dentro los secretos se sella y posee 4 orificios.
- Sus otá y mano de caracoles viven en agua de laguna.
- Sus atributos son un cuchillo de caña brava, un majá enroscado alrededor de la tinaja, un estómago de metal y el Ibirí.
- Sus Elekes se confeccionan alternando cuentas blancas de leche con cuentas azul profundo, otros los confeccionan de cuentas azules, blancas y rojas.
Los hijos de Nana siempre parecen actuar con calma, dignidad y benevolencia. Son muy equilibrados y aunque tomar decisiones les lleve bastante tiempo, con frecuencia las toman con justicia y sabiduría. Les gustan los niños y a veces suelen malcriarlos