Si queremos desenvolvernos en un sistema religioso o en una corriente espiritual, en primer lugar debemos conocer en qué consiste cada uno, para llevarla a cabo con propiedad
Muchas son las personas que demuestran un marcado interés en hacer filas dentro de una religión o cualquier otra manifestación grupal de tipo espiritual, sin tener una correcta idea de lo que trata la misma.
Una vez inmersos y comprometidos con un mundo desconocido, declinan los intereses dando lugar a sentimientos de decepción.
Quizás la culpa no es de los aspirantes, sino de nosotros los ya desarrollados en el campo, que no impartimos las correspondientes orientaciones y hasta en muchos casos, influyen el interés comercial para lograr adeptos.
Lo inaceptable es que personas que se vanaglorian diciendo que tienen gran cantidad de tiempo en las lides religiosas, todavía no puedan explicar a sus seguidores en qué consisten las prácticas que después van a llevar a efecto.
¿En qué consiste la Regla de Osha, mal llamada “Santería”?
La Regla o Religión de Osha, como segmento de la Religiosidad de Los Yòrubás, comprende un conglomerado de creencias y ritos establecidos para el culto o adoración de los Oshas (que también se denominan Orishas); es un régimen de dogmas, creencias y doctrinas fundamentadas principalmente en las reverencias a determinadas Deidades.
Esa adoración, perfectamente llevada a cabo, interrelacionará a Los Oshas u Orishas con los Seres Humanos dándole una comprensión a estos últimos de las significaciones de la vida terrenal.
Pero esa interrelación Osha/Hombre es directa, es específica y un tanto limitada: la relación se establece entre un Osha u Orisha en particular con una persona determinada; en el Mundo Occidental se manifiesta como “Ángel de la Guarda”- Creyente, “Ángel de la Guarda” –Hijo (Osha /Omo).
De más está aclarar que en dicha relación Osha/ Omo intervendrán, pero en estado más pasivo, otras Deidades y Entidades espirituales que serán un complemento del culto o reverencia. (Oloddumare-Olorun, Orunmila, Guerreros, Egguns)
En virtud de ello, para aquellos que profesan esta religión, lo primordial será la veneración atenta a ese Osha u Orisha por medio o intersección de esa particular adoración, complementada con el sustento de ofrendas y una ejecución de los rituales necesarios en el campo litúrgico. De esta manera cada Olosha en su propia casa (que funciona a manera de templo) y que es el sitio donde reposan los fundamentos religiosos representativos como cuerpos de adoración, cuidarán o guardarán a sus Deidades para seguir dando cumplimiento a la tradición que les ha sido transmitida.
Esto último se debe al hecho que La Religión de Osha está sustentada bajo una estructura “familiar”: tenemos ancestros y predecesores tanto a nivel del Espacio Celestial como del Mundo Terrenal, que conforman un “parentesco”, una Dinastía o Estirpe como descendientes de ese Osha u Orisha, por una parte, como también somos Sucesores de una Familia Religiosa, que a pesar de no mantener una estricta vinculación sanguínea como era antiguamente en África, crean suplementariamente una afinidad con los nativos originarios que llegaron en la época de la esclavitud, y mucho más hacia el pasado con sus antecesores.
Es así como se crea una Cofradía, una Confraternidad que va a estar integrada por Mayores (madrinas/padrinos) y Menores (ahijados) que tendrán como denominador común una misma Casta, derivarán de una misma Estirpe, procedentes de un mismo grupo étnico que está “obligado” a seguir perpetuándose a través de continuas y nuevas iniciaciones y consagraciones de carácter religioso, para poder conservar y transmitir los principios morales, conductuales, culturales, sociales, filosóficos y espirituales.
El culto o veneración a cada Osha u Orisha va a variar, está diferenciado, uno de otro, pues pertenecen a pueblos o etnias distintas que mantuvieron costumbres disímiles a pesar de vivir en territorios cercanos.
A pesar del transcurso del tiempo, son muchos los sacerdotes que han respetado y mantenido sin variantes “las semillas” originales heredadas en esta religión
Pero últimamente estos procesos de adoración se han ido perdiendo, pues ha imperado un afán de “unificar” la metodología de la veneración, no se sabe si buscando facilidad y comodidad en la ejecución de esos ritos, o por el egocéntrico complejo humano de imponerse sobre los dictámenes divinos.
Nunca puede ponerse como excusa que las “creaciones”, adaptaciones o modificaciones se justifican por el ambiente que en que se desarrollan, debido a situaciones de evolución en el tiempo o época, o debido al contexto social actual, pues esto es aplicable solo a hechos materiales, como La Moda, pero nunca a tradiciones religioso-espirituales.
Ashe, bendiciones y poder de poder hacer!!!