¿Quién es ELEGUA?
Elegua es la protección primera, ya que es el quien abre los caminos para continuar en la religión
Elegua o Eleggua es una de las deidades, de la religión yoruba. Elegua (o también conocido como Ligua, Liwaa, Legua) es el dueño de los caminos y el destino, es el que abre o cierra el camino de la vida, prosperidad, felicidad suerte o desgracia e incluso puede determinar sobre las influencias de otros egguns; es muy travieso y su nombre significa «el mensajero príncipe».
Elegua es una deidad muy dada a hacer trampas, y a la vez es quien comanda los ejércitos. Puede decirse que el favorito del Dios superior de su panteón.
La Leyenda de Elegua
Cuenta la historia que hace muchos, muchos años, en el reino fastuoso de un monarca africano, nació su hijo primogénito a quien llamaron Elegguá. A los 8 años, el niño era muy precoz, osado y travieso y daba mucho trabajo a sus progenitores. Un día, caminando por la orilla del mar con su guardián, vio un objeto brillar junto a una palmera y corrió a tomarlo.
Su guardián trató de impedirlo, previniéndole que podía ser un objeto peligroso ya que se veía raro y tenía dos intensas luces en el lugar de los ojos y una nube blanca y leve salía de su boca, pero Eleggua se escapó de las manos de su protector y escolta y corrió a tomar el objeto para llevárselo. Cuando lo tuvo vio que era el fruto de un cocotero y quedó fascinado, entonces oyó una voz que le decía, «cuídame y líbrame de las polillas y los gusanos que querrán comerme con el tiempo; si me proteges, te daré salud y prosperidad». El niño prometió al coco cuidar de él mientras viviera y lo llevó al castillo.
Allí contó su historia a su padre y a toda la corte, pero todos se burlaron de él y jugaron pelota con el coco, tirándolo de un lado a otro sin que Elegua pudiera evitarlo, y el consejero del rey le dijo a éste: «tu hijo te dará problemas con esa imaginación que tiene, vamos a esconder el coco para que se olvide de ese invento».
Pero ése mismo día el niño enfermó, y tres días después murió. La corte y todo el pueblo lloraron la muerte del príncipe y llamaron a un adivino que les dijo que un genio bueno que vivía encerrado en el coco había sido ofendido y ultrajado y que por eso había muerto el príncipe. A partir de ese momento el rey, arrepentido, mandó venerar al coco y pedir su perdón y protección, pero los ojos del coco nunca más volvieron a brillar.
Consultado nuevamente el adivino dijo: «debemos ponerle ojos, boca y oídos para que nos escuche y pueda hablarnos». Así que le incrustaron unos caracoles en el lugar de los ojos y el genio volvió a ver. Luego le incrustaron dos conchas en los oídos y el genio volvió a escuchar sus plegarias. Por último, le pusieron una boca y el genio habló y transmitió toda su sabiduría a aquel pueblo ignorante y lo perdonó. Aquellos caracoles que el adivino usó eran bucios, desde entonces los bucios adquirieron el don y el poder de comunicar a los mortales sus designios a través de la adivinación, así como la voluntad de los espíritus de los muertos y la de los dioses.
El coco, a quien pusieron el nombre del príncipe Elegua, fue desde entonces adorado y consultado con respeto por todos los sabios, adivinos y curanderos de todos los tiempos… Es el orisha que abre y cierra todos los caminos a la humanidad. Él es el divisor de los cielos y la tierra.
Viaja entre el cielo y la tierra dejando Olofi y Olodumare saber todo lo que pasa en la tierra. Elegua es un orisha infantil en algunos aspectos, que le encanta jugar con trucos y pone a prueba la fe del hombre.
Camina entre la noche y el día en busca de la humanidad para poner a prueba su fe y dar conocimiento a Olofi y orishas de esto. Este Orisha tiene 21 caminos y todos a la vez es uno solo… Elegua. Él va de un niño a un anciano con una gran cantidad de conocimientos. Hay también un camino de Elegua, donde la esencia es de una mujer. En más de la mitad de los caminos de Elegua, él es un niño pequeño que se encuentra en las curvas, cimas de las montañas, costas, las entradas del hospital, puerta del cementerio y así sucesivamente. Él tiene muchos nombres como ha sido llamado Elegba, Elegbara, Legba.
Elegua es visto en todo el mundo de continente a continente, Elegua le encanta sentirse, alabado y oído por sus hijos. Inseparable amigo de Ogun y Ochosi que el trío compone a «Los Guerreros», primera serie de los orishas para recibir en la santería. Elegua es el guardián de los muertos, también él, les abre la puerta a las personas fallecidas para caminar hasta llegar con Olofi donde descansarán, Este camino que se llama Eshu Alagwana.
En otras religiones o creencias se le puede asociar con el dios egipcio de los muertos Osiris, que lleva a los muertos por el inframundo. Elegua es el que te hace jugar a tu propio riesgo. En esto quiero decir, él te muestra los caminos, tal vez sin conocerlos, pero solo tú eres el que tomara la decisión de entrar, pero también solo te puede dar un tiempo o en cualquier momento puede cerrar esa puerta… Por eso se dice que elegua es el dios de la encrucijada. Si usted toma la decisión equivocada, Elegua le abrirá la puerta con su garabato (gancho de palo, del árbol de guayaba) para hacerle pagar sus consecuencias. Mientras que usted está pagando por sus errores, Elegua puede voltear a verlo con ciertas Ceremonias para ver si ya puedes tomar el camino correcto.
Si tienes éxito y tomas el camino correcto Elegua te abrirá la puerta a la felicidad y la fortuna. Si usted ha oído hablar de un laberinto, puede asociarse con Elegua. Nuestras vidas están en forma de laberintos y muchas veces no sabemos qué caminos tomamos. Elegua es el guardián que se encuentra en cada esquina y puertas del laberinto. Si usted hace algún movimiento en falso, abrirá el camino hacia el resultado equivocado. Si se toma el camino correcto, se abrirá el camino que usted está buscando. Elegua sabe y lo ve todo. No hay nada que Elegua no lo sepa.
Él es el mensajero de Olofi, Olodumare y orishas. Lo que significa, que es el que toma los mensajes de la humanidad a los orishas y los mensajes de los orishas a Olofi. Es por esto que es el orisha debe ser alabado en toda ceremonia realizada en la santería. Elegua es la protección primera, ya que es el quien abre los caminos para continuar en la religión. Los no iniciados o aleyos deben recibirlo o consagrarlo como primero.
Es la vista que sigue un camino, se convierte en un guerrero temible y feroz cuando se une a Oggún y Oshosi, nada lo detiene. Elegua es uno de los primeros Oshas u Orishas que se recibe. Es un Osha del grupo de Orisha Oddé, a los que se le llama Los Guerreros. Él es el primero de los guerreros junto a Oggún, Oshsi y Osun.En la naturaleza está simbolizado por las rocas. Eleguá vino al plano terrenal acompañando al Osha Obbatalá. Es considerado el mensajero fundamental de Olofin. Vive en la mayoría de los casos detrás de la puerta, cuidando el ilé de quien lo posee. Dueño absoluto de los caminos y el destino, es quien cierra o abre el astral para la felicidad o infelicidad de los seres humanos. Siempre se debe contar con él para realizar cualquier cosa. Es el portero de la sabana y el monte.
Descripción de Eleggua
Dentro de la lengua castellana resulta complicado el acoplar un idioma no escrito como lo es el yoruba, por lo tanto este orisha se le puede llamar Elewá, Ilegba, Eleguá, Elegba y Elegbara, en todas sus indicaciones se hace referencia a una misma deidad. Por otra parte, no se debe confundir a Eshu o Esu con Elegguá, ya que No es lo mismo, son entidades totalmente distintas y opuestas, Elegguá es la respuesta de Oloddumare (Dios) a esta otra Entidad llamada Eshu, es por ello que por cada Eshu existente existe un Elegguá que le hace la contra cara y de esta forma, el equilibrio del universo.
Elegguá, a pesar de ser considerado un niño, posee distintos caminos o avatares en donde también se presenta como joven, adulto, anciano e incluso se habla de la existencia de un camino femenino de Elegguá. Es uno de los primeros orishas que se reciben, es perteneciente al grupo de los «orishas odde» (guerreros), es el primero de los guerreros junto a Ogún, Ochosi y ozun. Se convierte en una deidad temible y feroz al unirse a Ogún y Ochosi, y nada lo detiene.
Dueño absoluto de los caminos y el destino, portero del monte y la sabana… es quien cierra o abre el astral para la felicidad o la infelicidad de los seres humanos, siempre se debe contar con Elegguá para realizar cualquier cosa. Es el primer santo que deben recibir los aleyos (creyentes no iniciados) porque es Elegguá quien abrirá los caminos para poder continuar en la religión, es entregado por babaloshas e iyaloshas… el babalawo es quien entrega Eshu que como mencioné anteriormente, es otra deidad y se entrega de manera muy diferente a como se entrega elegguá… al ser recibido, Elegguá debe vivir detrás de la puerta principal de la casa, cuidando así a quien lo posee.
Se sincretiza con el santo niño de atocha, pero NO SON LO MISMO, el niño de atocha es un santo católico, mientras que Eleggua es un orisha de la religión yoruba