La Mujer en La Religión Yoruba: Ma Monserrate González

0
La Mujer en La Religión Yoruba: Ma Monserrate González

En la bibliografía que se conserva sobre la religión yoruba en Cuba podemos contestarnos algunas interrogantes religiosas cómo la que da título a este artículo

Un ejemplo de lo anterior es el libro: Los negros brujos en Cuba, escrito en 1906 por el reconocido antropólogo cubano Fernando Ortiz, un testimonio de que mujeres de origen yoruba eran las que dirigían todas las grandes ceremonias religiosas en las que, incluso, participaban Babalawos.

Hasta finales de los años 70´ existían, en Cuba, mujeres oriates dirigiendo ceremonias de Osha y algunas como Caridad Cuesta, Rosa la Grande o Emelina; estuvieron activas hasta 1980.
María Towa conocida como la Reina Lukumí fue la primera persona en Cuba de origen africano que escribió sobre Ifá y Osha. Era venerada por todos los Babalawos y Olorisas de su época y su rango religioso se consideraba por encima de todos los yorubas practicantes de la religión entonces.

El primer Oduduwa que se entregó en Cuba lo entregó en Matanzas Ma Monserrat y Ferminita Gómez fue la que entregó el primer Olokun, ambas dirigían esos cultos a nivel nacional. No existía otro culto a Oduduwa ni a Olokun, en aquellos años, que no fuera el que estas dos mujeres dirigían.

Sin embargo, hoy día estas deidades son entregadas por Santeros de una manera y de otra por los Babalawos ya que estos últimos consideran que las mujeres no están autorizadas a participar en estas ceremonias exclusivas de Ifá.

Después de leer e investigar todo lo que la historia recoge sobre estas mujeres: adivinas, reinas, dueñas de los secretos de Orisa- Ifá; y descubrir que eran ellas, las mujeres!!! las que dirigían a Babaloshas y Babalawos amparadas por una supremacía religiosa reconocida, incluso, por los propios yorubas en Cuba, la pregunta obligada es: ¿Qué rango religioso tenían ellas tan superior al de la mujer actual?, Y solo me vienen a la mente dos respuestas: o el rango de sacerdote de Orisa ( santero/a) era jerárquicamente superior al de Babalawo o aquellas mujeres eran reconocidas Iyaonifas!

En parte por lo anterior y por otras incongruencias, considero más importante para los sacerdotes del Ifismo cubano, entender las contradicciones existentes entre la práctica actual y la práctica original de nuestra religión dentro de Cuba que preocuparnos por las contradicciones entre el tradicionalismo yoruba africano con el Ifá cubano. Cómo dice Ifápoco a poco nos comemos entre todos la cabeza de la rata.

El debate y análisis de las diferencias entre la práctica Orisa-Ifá de antes y la práctica de Orisa-Ifá de ahora, en Cuba, es más necesario y producente para el Ifá cubano que las críticas y ataques mutuos entre tradicionalistas y diáspora. Sin embargo, en ningún foro se habla sobre estos temas. Y para su propia vergüenza, algunos, solo se dedican a desprestigiarse entre sí, sin detenerse a pensar que esa violación del código ético de Ifá, lejos de aportar un beneficio a nuestras religiones es lo más sacrílego que se puede hacer; la más grave falta de respeto a nuestros ancestros y a Olodumare!
Contradicciones de tipo religioso existen tanto en Nigeria como en Cuba, ¡Nadie esta exento de ellas! pero todos tenemos el deber de buscar la verdad.

Muchos hablan de cosas mal hechas fuera de Cuba, juzgando prácticas que no son las suyas, pero nadie se pregunta, por poner un ejemplo, ¿por qué en la isla se realizan consagraciones de Orí y Egungun que nunca existieron en la tradición cubana? Ni se preocupan tampoco por las contradicciones que mencioné antes sobre el papel de la mujer en la religión yoruba dentro de la misma Cuba.

Ocupémonos, primeramente, de esclarecer y rectificar las contradicciones que tenemos dentro de nuestra propia tierra y tengamos la sensatez de comprender que la praxis del Ifá tradicionalista en África no tiene por qué estar exento de interrogantes y diferencias respecto a la diáspora o incluso respecto a ellos mismos. No se tiran piedras al vecino si nuestro tejado es de vidrio!

¡Es necesario recuperar nuestras raíces! Aclarar todas estas incógnitas NO es una tarea imposible; tenemos el legado de prestigiosos historiadores y etnógrafos de la época que escribieron libros que ayudan al esclarecimiento de este tema que, a pesar de su importancia, repito, no es debatido como se debiera. Intentar encontrar la verdad es nuestra obligación como religiosos.

Oluwo Ifatoló

 Magaly Gutíerrez en Facebook 

No hay publicaciones para mostrar

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!