Recientemente publicamos un escrito sobre la Ceremonia de Collares para los Aleyos (puedes leerla haciendo clic aquí) en el cual detallamos, sin revelar ningún secreto de la Osha, cual es el proceso para iniciarse en Santería mediante la recepción de collares. Ahora bien, cuando a un iniciado le coronan santo, estos collares de Aleyo, son reemplazados por un nuevo juego de collares como santero(a).
Estos collares de santero son consagrados por un ceremonial secreto que se lleva a cabo dentro del cuarto de santo, el mismo día de la coronación.
En cualquiera de los casos los collares son consagrados con cada una de las deidades que representan, estas consagraciones son diferentes para los collares de un aleyo y de un santero, sin embargo de ambos emana la energía de la deidad de la cual proviene. En pocas palabras los collares de osha son una representación portátil de cada uno de los orishas.
Esta es la razón fundamental de su importancia, cuando una persona carga puestos sus collares debidamente consagrados, esta portando una representación de cada uno de los Oshas, y en caso de necesidad, sus elekes o collares son un medio de comunicación con el santo si se está lejos de él.
No se debe mal interpretar el comentario anterior y pretender que se le puede encender una vela a los collares, ni nada parecido, pero si estás en la calle y necesitas la intervención de algún orisha, puedes retirarte a un lugar aislado, tomar en tus manos el collar de la deidad cuya ayuda necesitas invocar y sin quitártelo en ningún momento puedes pedirle con fe al santo.
Cuando se entiende la relación directa de los collares con los santos, se hace muy fácil entender la importancia de darle un correcto uso y cuidado, ya que deben recibir casi las mismas consideraciones y respeto que los Orishas.
