El mundo del espiritista es una maravilla, gozar de los dones y poder desarrollar las habilidades que los mismos nos otorgan es siempre causa de impresión para quien goza de ello
Entre esas habilidades está el de sentarse frente a una bóveda espiritual, y al mirar los vasos, “ver” en ellos figuras, imágenes y revelar verdades a quienes van dirigidas las revelaciones. ¡Y más aún, cuando podemos poner un vaso con agua entre una persona y quien tiene el don, y con sólo mirar dentro podemos decir detalles, situaciones, describir y llegar hasta ver nombres! Pero la pregunta es cómo es que vemos en el vaso?, y la respuesta verdadera es la siguiente:” el espíritu o Eggún , muerto o entidad espiritual utiliza el agua como vehículo de trasmisión para poner en la mente del médium o espiritista lo que es su alcance, lo que puede revelar, por lo que no es en el agua que se ve, sino en su mente, por eso mismo, cuando ese espiritista llega a grados de excelencia en su desarrollo espiritual, llega a no necesitar ni el vaso de agua, ya que su espiritualidad está tan desarrollada, que no hace falta, pasando a veces como loco(a), hasta que se convence a sí mismo y aprende a discernir entre su pensamiento y el mensaje de sus muertos o del muerto que no siendo propio de su cuadro espiritual, necesita de su canalización para dar el mensaje.”. Aprovecho para comentar que tener esas facilidades o dones no siempre es una bendición, porque el don a veces es como un scanner y podemos percibir fácilmente en las personas que nos rodean la hipocresía, la falsedad, las malas intenciones ocultas en sus actuaciones, lo que en mi caso, nos aleja del mundo y nos hace construirnos una vida dentro de una burbuja, para mantenernos a salvo de que nos lastimen. Por allí hay un post que sale mucho en Facebook que dice algo así como que “El que tiene muerto no necesita más nada, y es por esto, porque sólo mirar a los ojos”, o en mi caso, al despertarme, sé quién está actuando para hacerme daño, aunque esté a miles de kilómetros, y si no sé el nombre, por lo menos, entiendo lo que está sucediendo. A quienes están en esa carrera o proceso de desarrollo espiritual, los invito a entender que esto es una misión, y aunque en muchos casos percibimos un pago por el servicio de nuestros dones, no tenemos derecho a utilizarlo para hacer daño a nadie, ni por que creamos que es nuestro derecho, ya que arriba hay un Dios, y cada quien tiene un ángel de la guarda Y un Guía Espiritual que ve nuestros actos, aparte de que los espíritus al ver que utilizamos los dones para hacer mal, llegan hasta retirarse del plano de la tierra y dejan de ayudar porque su materia ya no está conectada a la misericordia, a la caridad, a la fe, al bien, sino, a todo lo malo que existe dentro de la naturaleza humana y se eleva, quedando su misión sin cumplir en el plano de la tierra.
Bendiciones
Javier Gil Omo Shango