Cuando un Espíritu Bueno se acerca, la sensación es agradable y sublime, pero los Malos Espíritus o Espíritus Imperfectos la sensación de su presencia es completamente lo opuesto
Es importante aprender a diferenciar las sensaciones que se sienten cuando se aproximan los Espíritus a nosotros. Lo grandioso del Espiritismo es que nos enseña a diferenciar cuando están cerca.
Cuando un Espíritu Bueno se acerca, la sensación es agradable y sublime, pero los Malos Espíritus o Espíritus Imperfectos la sensación de su presencia es completamente lo opuesto. Ahora bien, cuando se acerca el Espíritu Bueno se producen lágrimas de felicidad (algunas veces) y exaltación positiva. Si lloras por razones triviales de la vida, das lugar a que Espíritus Imperfectos se aprovechen de esta debilidad humana que son momentáneas, para buscar la manera de ocasionar una obsesión espiritual. Por eso todo pensamiento de tristeza debes manejarlo para pasarlo pronto o lo más rápido posible con firmeza y severidad. Este conocimiento te ayuda a estar preparado para estos acercamientos.
Muchos médiums reconocen los buenos y los malos Espíritus con la impresión agradable o desagradable que resienten al acercarse. La impresión desagradable, la agitación convulsiva, el malestar, en una palabra, ¿son siempre indicios de la mala naturaleza de los Espíritus que se manifiestan?
El médium experimenta las sensaciones del estado en que se encuentra el Espíritu que viene a él. Cuando el Espíritu es feliz, está tranquilo, ligero, sosegado; cuando es desgraciado, está agitado febril y esta agitación pasa, naturalmente, al sistema nervioso del médium. Por lo demás, lo mismo sucede al hombre en la Tierra: el que es bueno está sereno y tranquilo; el que es malo, sin cesar está agitado.
Hay médiums de una impresión nerviosa más o menos grande; por esto la agitación no podría ser mirada como una regla absoluta; en esto como en todas las cosas es menester tomar en cuenta las circunstancias. El carácter penoso y desagradable de la impresión es un efecto de contraste, porque si el Espíritu del médium simpatiza con el Espíritu malo que se manifiesta, estará poco o nada afectado. Por lo demás, es preciso no confundir la rapidez de la escritura, que tiende a la extrema flexibilidad de ciertos médiums, con la agitación convulsiva que los médiums más lentos pueden experimentar al contacto de los Espíritus imperfectos.
La sensación que se percibe, define a los Médiums Sensitivos o Impresionables:
- Médiums Sensitivos o Impresionables.- Se designan así las personas susceptibles de sentir la presencia de los Espíritus por una vaga impresión, una especie de rozamiento sobre todos los miembros, de lo cual no pueden darse cuenta. Esta variedad no tiene carácter bien marcado; todos los médiums son necesariamente impresionables; la impresionabilidad es antes una cualidad general que especial; es la facultad elemental indispensable para el desarrollo de todas las otras; difiere de la impresionabilidad puramente física y nerviosa, con la que es preciso no confundirla; porque hay personas que no tienen los nervios delicados y que sienten más o menos el efecto de la presencia de los Espíritus, de la misma manera que otros muy irritables no lo sienten. Esta facultad se desenvuelve por la práctica, y puede adquirir tal sutileza que aquel que esté dotado de ella reconoce en la impresión que siente no solamente la naturaleza buena o mala del Espíritu que está a su lado, sino también su individualidad, como el ciego reconoce por cierto instinto la aproximación de tal o cual persona; viene a ser con relación a los Espíritus un verdadero sensitivo. Un buen Espíritu hace siempre una impresión dulce y agradable; la de un mal Espíritu al contrario, es penosa, ansiosa y desagradable; hay como un olor de impureza.» Por lo tanto es bien marcado la sensación que se tiene de un espíritu cuando se acerca a ti, dependiendo de su naturaleza de bondad o de maldad
Cuando el espíritu protector se acerca a ti, sabemos que es bueno SIEMPRE, su presencia en El médium experimenta las sensaciones del estado en que se encuentra el Espíritu que viene a él, la impresión es agradable y consoladora. Estos son los indicios que debemos conocer con relación al comportamiento de los Espíritus.